Hoy quiero informaros de un tema bastante controvertido en España. Separa la sociedad en dos lados: la gente en favor y la gente en contra. Hablamos de un debate español que tiene que ver con las tradiciones, con cuestiones del animalismo y – por supuesto – con cuestiones económicas. Incluso Ernest Hemingway habló del tema de hoy:
“Es moral lo que hace que uno se sienta bien, inmoral lo que hace que uno se sienta mal. Juzgadas según estos criterios morales que no trato de defender, las corridas de toros son muy morales para mí.”
¿Pero qué son las corridas de toros? ¿En qué consisten?
Hoy os doy información sobre el procedimiento de dicha tradición para tener una idea de qué trata y qué origen tiene.
Es probable que las corridas de toros vengan de las llamadas venationes de la Antigua Roma. Formaron parte del entretenimiento de la sociedad romance. Fueron luchas entre hombres y animales salvajes. Durante la Edad Media existían corridas de toros como un juego de caballero donde el caballero luchaba contra un toro montando a un caballo. Las corridas de toros – como se llevan a cabo hoy en día – se evolucionaron a principios del siglo XVIII a través de Francisco Romero. La primera escuela de toreros se fundó en 1830 por Pedro Romero, el nieto de Francisco.
En una corrida de toros participan varias personas: el matador, los picadores y los banderilleros. Se separa en tres fases principales que se llaman tercios. Cada tercio se anuncia a través de toques de corneta.
El primer tercio, el Tercio de Varas, tiene como objetivo “leer” el comportamiento y el ser del toro. El matador utiliza el capote para provocar el toro y a través de eso intenta entender cómo se mueve y cómo ataca el toro. En esta fase se entera de las capacidades del toro y las posibilidades del matador. Además hay dos picadores en la arena que hieren el cuello del toro. Por eso la musculatura lesionada del toro tiene el rebajamiento de la cabeza como consecuencia que es importante para el matador en la tercera frase.
En el segundo tercio aparecen los banderilleros que pican tres pares de picas con decoraciones abigarradas en la espalda del toro. Así desfallecen el toro y marcan la posición de los músculos de hombro.
En la tercera parte, la Faena, solamente están el matador y el toro en la arena. Normalmente dura ocho minutos y el toro ya está malherido. Objetivo de esa fase es matar el toro a través de un estoque. El matador intenta entra entre los hombros con el estoque para tener acceso al corazón del toro. Como eso no mata el toro, viene un puntillero (ayudante) que pica en la nuca.
La semana que viene publicamos pros y contras de las corridas de toros para enseñar el alcance del debate en España.
Saludos,
Matthias H.
Leer Más